lunes, 5 de agosto de 2013

POCH: Todo queda entre cómplices y cuates

  

• Tras el escándalo de Isabel Aguilera de Sabines, designan como líder del partido  a un junior que sólo se  vive en los antros

• Víctor Moguel Sánchez pide cárcel a los saqueadores del pasado, pero oculta su estrecha amistad con la familia Sabines Aguilera


          Mario Caballero/Areópago.

         El espectáculo se centuplica. Los pobres políticos del sexenio anterior dejaron de ser políticos pobres para formar parte de esa divina pléyade de políticos ricos. Y esta frase que aunque parece a un mero juego de palabras, sirve para afirmar aquel aforismo que dijo Maquiavelo -y si no lo dijo, pues debió decirlo: “Vivir es para simples mortales, pero vivir del presupuesto es divino”.
        El Partido Orgullo Chiapas (invento moderno del paracaidismo presupuestal de la era sabinista) que recibe cada mes de presupuesto 389 mil 205 pesos que al año forma la cantidad de 4 millones 671 mil, no es otra cosa que una oportunidad para que los que integraron el gobierno pasado sigan en el presupuesto, ejerciendo su derecho ilegítimo de participar en la toma de decisiones del gobierno e incrementando la cantidad del fraude de los 40 mil millones de pesos, y cuyos principales implicados siguen en la impunidad.

        Esta aportación para nada voluntaria y que no beneficia a los chiapanecos bien podría utilizarse en asuntos prioritarios como la escasez alimentaria que padecen miles de personas en zonas marginadas, en donde comer sopa nissin es un manjar dominical;  o para combatir la dispersión social o invertirla en infraestructura en las comunidades rurales, o en educación, etcétera. No para dejarla al servicio descarado del POCH.
Y a esto la Sra. Isabel Aguilera de Sabines, no muy al tanto de las severas críticas a su ex partido –o si lo está entonces es un real acto de cinismo-, exhortaba a todo el pueblo chiapaneco, pero especialmente a la militancia, a no desperdiciar la oportunidad de derramar elogios y alabanzas sobre el POCH: “Trabajamos en unidad/Somos de puertas abiertas/Estamos comprometidos a respetar la democracia participativa sin discriminación de raza, color o filosofía”.
Puede que la señora de Sabines estuviera en lo cierto y, para documentarlo, abordo algunos motivos para soltar el homenaje:
 

La ilegalidad
        El POCH nació como por generación espontánea. Brotó del autoritarismo y abuso de poder de Nemesio Ponce Sánchez tres meses antes de las elecciones de julio del año pasado eludiendo la reglamentación constitucional e incurriendo en los delitos de alteración de documentos, falsificación de firmas e invención de nombres, concluyendo el proceso de registro con el visto bueno de un juez del IEPC miembro de la misma mafia. 
 

La dirigencia
        María Isabel Aguilera Aburto, esposa del ex gobernador Juan Sabines Guerrero, se prestó a la fantasía de ser la dirigente emérita del POCH. Y ahí todo quedó claro: el objetivo de posicionarla al frente del partido se trata de bloquear los accesos al presupuesto a toda persona no adherida al gremio sabinista y, por supuesto, para repartirse entre la élite los beneficios políticos coyunturales.
Súmale a esto la contumelia de la presidencia del partido, donde su proceder es algo así como una simulación, imaginaria por llamarle de algún modo. Porque según afirmaciones de Mercedes León Hernández, fiel ayudante y cómplice de la dirigente: Isabel Aguilera “permanece en un lugar desconocido” desde el cual gira las instrucciones a los subordinados a través de videoconferencias y mensajes por el “whatsApp”.
 

La impunidad

        La impunidad ya no es una característica más en los políticos, sino su razón de ser, su naturaleza, su condición humana. Y si alguna vez fueron honestos, ya no se recuerda. Y si la ex señorita Tlaxcala 1990, María Isabel Aguilera Aburto lo fue, pues ya no lo parece. Ya no es aquella dama que en el año de 1997 llegó a Chiapas portando modestos pantalones de mezclilla y sandalias de fabricación nacional. Ahora luce marcas Chanel, Victoria Secret, Zara y Carolina Herrera.
       El saqueo en el POCH es impresionante. Se conoce además que aparte de los sustanciosos recursos que el partido recibe puntualmente de prerrogativa le llegaron en su momento carretadas de dinero autorizadas por el “Camillero del Palacio” Nemesio Ponce Sánchez para enriquecer a los miembros de su caterva, que hoy siguen recreándose en la impunidad y en medio de un festín abusivo que recrudece más la crisis económica en la entidad.  
       La impunidad del POCH viene siendo algo así como una impunidad autista, donde los impunes (los militantes y los altos mandos) creen estar solos, no obstante la solemnidad de las auditorías, pensando que nadie los supervisa, nadie se entera y nadie se informa del curso del peculio porque juzgan que a nadie le interesa.
 
El aplastamiento de las reinas
       Los 21 mil votos que consiguió el POCH en los comicios pasados fue una demostración de la mediocridad y de la falta de capacidad para transitar en la voluntad del pueblo. De eso no hay duda alguna. Y con la derrota también quedó confirmado que el partido no fue construido para ofrecer una alternancia política más (una opción entre las opciones), sino una especie de caja chica para seguir saciando la voracidad de poder y dinero.
      Marvin Lorena Arriaga, la que pasó a ser la directora del CONECULTA después de ser la encargada de elaborar la síntesis informativa de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos con recortes de periódicos, fue la primera en lograr ser candidata a la gubernatura, pero su propuesta fue fugaz ya que los de la cúpula no vieron en ella posibilidades de arrancarle a la gente un solo voto a su favor debido a su comportamiento caciquil y autoritario, y porque a Nemesio Ponce le cayó gorda.
       Ante el desafío directo, el POCH saca como su abanderada a la señorita Chiapas 1987, Marcela Bonilla Grajales, dueña del restorán Los Ladrillos, en Chiapa de Corzo. Su primera aventura en la política bien puede calificarse de humillante, pues hizo gala de ser ignorante en la política y su actuación se pareció más bien a una propaganda al shuti y a las botanas de carraca que a una campaña proselitista real. El resto es tristeza.
 

Los dogmas
      Sin ideales y principios políticos, el POCH adopta ciertos dogmas que lo singularizan: a) subsistir por el regalo de la irracionalidad del 2% de la votación. b) lo que no se ve en los periódicos, radio y televisión (robos, atropellos, escándalos, sobornos, etc.), no existe. c) lo importante no es lo que se pueda hacer por los demás, sino lo que se puede recibir del pueblo. d) la reputación reprensible es lo de menos, lo que vale en este momento es el hecho de seguir en el presupuesto, por lo demás, todo trae consigo su propio olvido.
 

6.- La farsa
      Rebasada por los escándalos y la indignación de los chiapanecos que siguen clamando justicia ante el saqueo, el Partido Orgullo de Chiapas se sacó de la manga una jugada llena de telarañas al anunciar, con bombos y platillos, que reestructuraba su dirigencia designando como presidente del partido a Víctor Moguel Sánchez.
      ¿Pero quién es éste Víctor Moguel Sánchez? Es un junior que de política no conoce un ápice, pues se la vive de antro en antro en la capital tomando whisky buchanans. En sus primeras declaraciones, ya ungido jerarca del partido, Sánchez se desligó de la banda sabinista y hasta pidió que se encarcele a los saqueadores de ese sexenio.
       Qué embuste, pues él formó parte de ese gobierno en la Secretaría de la Frontera Sur y tiene muy cercana relación y amistad con la familia Sabines Aguilera. Antes de ser líder del POCH se desempeñaba como regidor del Ayuntamiento de Tapachula.
Es la misma gata, sólo que ahora revolcada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario